El Arsenal se juega el proyecto 2022-23

El Arsenal ha vuelto a firmar un campeonato alejado de la pelea por el título. Sin embargo, a diferencia del pasado curso, esta vez sí pelean deportivamente por hacerse en propiedad con una de las diferentes plazas europeas que están en juego.

Y no sólo optan a plazas continentales, sino que tiene en su mano la posibilidad de volver a Champions League siete años después. Desde la temporada 2016-17 no tienen el privilegio de escuchar el himno de la UEFA Champions League.

Sin embargo, pese a que el comienzo de temporada no fue el esperado y su regularidad no ha sido tal como se esperaba, lo cierto es que tienen opciones serias y reales de volver a la máxima competición continental la próxima temporada.

El Arsenal tiene dos partidos aplazados pendientes que podrían traducirse en seis puntos claves para su sueño y deseo. La irregularidad del West Ham podría ser la gran clave para que el sorpasso se confirme oficialmente. Y ya no sólo eso, sino que la distancia mínima entre ambos conjuntos y los dos encuentros pendientes para los del Emirates Stadium hará que, si los Gunners cumplen, lo tienen en su mano.

Mikel Arteta habló del objetivo europeo del Arsenal, pero lo hizo, además, hablando del proyecto futuro para la próxima temporada. Que el conjunto del Norte de Londres consiga volver a la Copa de Europa sería clave para poder retener jugadores y mantener a los jóvenes valores que ya tienen ofertas de fuera. Pero, además, sería un argumento serio a favor para  intentar reforzar el equipo con jugadores de primer nivel.

Jugar el máximo torneo del Viejo Continente es una motivación extra para los jugadores y si el equipo londinense consiguiera certificar su vuelta sería un destino interesante de cara al próximo verano.

Por su sequía europea desde 2017, por mantener a jóvenes valores que empiezan a ser tentados, por sumar un argumento importante de cara al proyecto 2022-23. El Arsenal tiene argumentos de sobra para que conseguir una de las primeras cuatro plazas (seguramente la cuarta, por la alta exigencia del resto de equipos) sea un objetivo tan emocionante como apetecible.